jueves, 25 de agosto de 2011

Los vecinos se quejan de la suciedad en las calles y parajes de La Vila

  • Con esta imagen la Vila se aleja cada día más de ser una ciudad limpia y cuidada.
Durante el mes de julio, se anunció por parte del Partido Popular un refuerzo en el servicio de limpieza público con la intención de aumentar las prestaciones en el municipio. Pasados dos meses, podemos comprobar que aquello solo fue un anuncio más ya que en los diferentes barrios los vecinos se están quejando del abandono y suciedad en todos los rincones de La Vila. Este refuerzo, además de estar encaminado a pagar favores electorales, llevaba consigo el paquete de la contratación del exconcejal de limpieza pública como asesor responsable del contrato de limpieza y recogida de residuos urbanos, nombramiento a efectos del día 1 de julio.

Como muestra, añadimos a esta nota una foto de nuestro paseo marítimo un sábado de agosto a las 21:15 h. donde se aprecian los contenedores llenos de basura y bolsas repletas de la misma a su alrededor. Una ciudad con espíritu turístico que se permite que uno de sus estandartes presente esta imagen, solo conlleva la idea de que el gobierno municipal ni existe, ni se le espera.

Esta penosa imagen se podría haber evitado si se hubiera cumplido el acuerdo establecido en una reunión mantenida entre los técnicos municipales, los de la empresa adjudicataria, los técnicos del Ministerio y miembros del equipo de gobierno del anterior alcalde socialista Gaspar Lloret que acordaron soterrar todos los contenedores, tanto orgánicos como de reciclaje, en el paseo marítimo.

El Grupo Municipal Socialista exige que los responsables municipales del área se pongan a trabajar, sobre todo ahora que existe un asesor contratado por el alcalde cuya labor es la de supervisar a la contrata de limpieza pública, desde el GMS pensamos que difícilmente un exconcejal que dejó un servicio paupérrimo es la persona indicada para llevar a cabo dicho menester. El Partido Popular se ha hecho valer del pliego de condiciones de la contrata para quedar bien con el exconcejal y de esta manera, aplacar sus iras por no estar en la lista municipal.