- Además, ya existe una sentencia contraria del TSJCV ante el mismo caso en Torrevieja.
En mayo, mediante decreto, se ratificaba la anulación y revocación de la Ordenanza Fiscal Reguladora de la Tasa para Aprovechamiento Especial del Dominio Público Local, informando en el Pleno que el decreto tenía su fundamento en un informe del Departamento de Rentas. El alcalde tránsfuga Jaime Lloret fundamentó la anulación porque la Ley Reguladora de las Haciendas Locales establece que las ordenanzas fiscales deben ser publicadas en el Tablón de Edictos, en el BOP y en un diario de mayor difusión de la provincia. Demostrando la ineptitud de este desgobierno local, no se insertó en el Tablón de Edictos, por lo que decidieron anular la Ordenanza Fiscal Reguladora de la Tasa.
El Grupo Municipal Socialista manifestó que esperábamos que se abriera una nueva etapa basada en la prudencia que tuviese continuidad en el tiempo y que este hecho no fuese una excepción.
Un mes después, en junio, vuelven a llevar a Pleno la misma ordenanza fiscal; en aquel momento el concejal delegado del área, a instancias del alcalde tránsfuga, explica que se aprueba la imposición de la tasa el 17 de junio de 2010, que se habían presentado alegaciones a la misma pero que SUMA había emitido un informe en el que resuelve desestimar las alegaciones y aprobar definitivamente la imposición.
Cinco meses después, se presenta una propuesta para rectificar el error cometido en el acuerdo plenario de 21 de octubre de 2010, hecho que demuestra claramente la descoordinación entre el alcalde y el concejal delegado del área que llevan a este ayuntamiento continuamente al desorden generalizado y al caos administrativo.
El corta y pega que está utilizando el alcalde tránsfuga indica la falta de dedicación al trabajo que está ostentando. Si ha tenido que pasar medio año para que se pueda llevar de nuevo a Pleno esta ordenanza, el único culpable no es otro que el tránsfuga Jaime Lloret.
El Grupo Municipal Socialista, en declaraciones de su portavoz, “quiere manifestar que estas continuas demostraciones de falta de planificación nos están dando la razón de que en La Vila es necesario un cambio político ya que hoy en día no hay concejalía que se salve; todas actúan a salto de mata esperando que llegue el 22 de mayo para abandonar el barco. Les importa muy poco las vías de agua que están generando por su desidia y desinterés”.
Gaspar Lloret, continua diciendo que “lo preocupante del caso es que la ordenanza fical no podrá ponerse en práctica hasta el 2011 y la existencia de un caso semejante en otra localidad en que la Justicia ha anulado un caso que presenta analogías con éste, nos deja en el aire la implatación de esta ordenanza a todas luces recurrible”.