Por si alguien todavía lo ponía en duda, el pleno muncipal celebrado esta mañana ha demostrado una vez más que el equipo de gobierno formado por once concejales tránsfugas, es un gobierno con freno y marcha atrás, sobre todo en cuanto a medidas económicas que favorezcan al conjunto de la población. Los once concejales que gobiernan en el Ayuntamiento han votado en contra de la moción presentada por los grupos de la oposicón que pedía aprobar una rebaja en el Impuesto de Bienes Inmuebles, reduciéndolo al 0’40 % en el caso de bienes inmuebles y urbanos y rústicos.
Pero lo que realmente pone en evidencia la doble cara del gobierno local y su cinismo oportunista es que hace tan sólo un mes, el concejal de Hacienda, Pérez Melero, daba a conocer en un medio informativo su decisión de rebajar el tipo impositivo del IBI precisamente al 0’40 %, una propuesta que presentarían al pleno de septiembre. Esa medida, según palabras textuales del concejal, era la de “amortiguar el próximo año la subida que seguiremos sufriendo tras la revisión catastral realizada en
Ante la falta de presentación formal de dicha propuesta por parte del equipo de gobierno, fueron los grupos de la oposición quienes la formalizaron, dos días después de esas declaraciones. La sorpresa de todos ha surgido cuando, en el pleno de esta mañana, los once concejales del equipo de gobierno han votado en contra de la propuesta, esgrimiendo un informe de Intervención donde se razona la imposibilidad de aplicar la rebaja en base a que el Plan de Saneamiento vigente quedaría mermado en sus recursos.